« Quand le mystère est trop impressionant, on n’ose pas desobéir » (Le Petit Prince) Sólo la confianza y una humildad profunda nos empujan a adentrarnos en el misterio… y de un lugar desconocido en nosotros surge una obediencia asombrada y una fuerza y una certeza que no sabíamos que estaban allí.